La educación argentina en crisis: desfinanciamiento y ajuste

Ante el inminente inicio de clases en todos los niveles educativos, se evidencia la crítica situación que atraviesa la educación en Argentina. El incumplimiento en la transferencia de fondos esenciales destinados al funcionamiento de las escuelas y universidades, y al bienestar de los estudiantes y docentes, provocará un deterioro significativo en la calidad educativa y en las condiciones laborales de quienes forman parte del sistema.

El desfinanciamiento y el brutal ajuste del gobierno nacional de Javier Milei se evidencia concretamente en la falta de envío de las partidas a las provincias pertenecientes al Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), Fondo Compensador Docente, así como también de las partidas nutricionales para los comedores escolares, las de extensión horaria de la quinta hora y la paralización de las obras en las escuelas.

Asimismo, en la educación superior se observa un tremendo ajuste y desfinanciamiento en el presupuesto a las universidades nacionales y también el congelamiento de las Becas Progresar impulsadas en el año 2014 durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y que brindan ayuda a millones de estudiantes para que puedan acceder, permanecer y terminar sus estudios.

Es importante entender que el no envío de recursos al Fondo Nacional de Incentivo Docente y al Fondo Compensador ya está impactando directamente en los salarios de los trabajadores de la educación, afectando su capacidad adquisitiva y desalentando su labor. Además, la falta de partidas para los comedores escolares está dejado desprotegidos a miles de chicos y chicas que dependen de estas comidas como su principal fuente de alimentación diaria.

La paralización de las obras en las escuelas, sumado a la ausencia de fondos para la extensión horaria de la quinta hora, refleja la desidia gubernamental hacia la infraestructura educativa y el bienestar de la comunidad escolar, que, en la provincia de Buenos Aires, según la Defensoría del pueblo bonaerense, alcanza a 64 obras en escuelas frenadas porque el gobierno de Javier Milei recortó 14 mil millones de pesos para su finalización.

Ante esta situación crítica, desde el bloque de Diputados de Unión por la Patria en los últimos días nos reunimos con los representantes de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CETERA) para acompañar sus justos reclamos, y hemos elevado proyectos de Ley para el restablecimiento de las partidas del FONID, para que se ajuste por inflación el presupuesto destinado a las universidades nacionales, y para el fortalecimiento de las Becas Progresar.

El desfinanciamiento y el brutal ajuste del gobierno nacional sobre el presupuesto educativo constituyen una grave amenaza para el futuro de la educación en Argentina. Es imperativo que se tomen medidas urgentes para revertir esta situación y garantizar el acceso a una educación de calidad para todos los ciudadanos. El compromiso de los legisladores y la movilización de la sociedad civil son fundamentales para exigir un cambio de rumbo que priorice la educación como pilar fundamental del desarrollo nacional.

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